lunes, 9 de septiembre de 2013

NO PERMITAS QUE SE AHOGUEN TUS ZAPATOS (Cómo salvarlos del agua)

Con los cambios climáticos tan impredecibles no siempre tenemos las botas de lluvia listas y preparadas para cuando comienza la tormenta, por lo que seguramente ya tienes más de un par que ha sufrido las consecuencias. Cada calzado tiene sus especificaciones y sus daños por el contacto con el agua, ¡pero también cada uno tiene su manera de salvarse!
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A continuación te damos algunos #PlazaparTips para cada rescatar cada tipo de calzado del naufragio.


1.- Piel: Uno de los materiales más difíciles de tratar pero no imposible. La piel necesita ayuda inmediata, así que no esperes para reparar el daño. Lo primero que debes hacer es rellenar los zapatos de periódico completamente, sin dejar ningún hueco, esto ayudará a transferir la humedad al papel y evitar que aparezca moho. Debes tener en cuenta que los zapatos deben sentirse duros por la cantidad de periódico que tendrán dentro.
Después de esto deja los zapatos colgados frente a un ventilador por medio día (o más, dependiendo cómo los sientas). ¡Podrás usar tus zapatos después de 48 horas de que estén secos! Si les queda un olor a humedad, puedes colocar una cucharada de bicarbonato para que absorba el aroma.

2.- Zapatos de Plataforma de Corcho: Puede parecer bastante complicado, pero también tiene solución. Por lo general la parte superior suele ser de tela, para ésta parte utiliza agua con jabón y un pequeño cepillo. Para el corcho, deberás utilizar un trapo, limpia suavemente en la misma dirección hasta que quites todo lo sucio (o la mayor parte), utiliza otro trapo limpio para secar.  Si te quedaron algunas manchas oscuras, con un simple borrador podrás quitarlas.

3.- Zapatos de Gamuza: Al igual que con los zapatos de piel, rellénalos de papel periódico. En seguida, utilizando una toalla de papel, presiónalos por fuera hacia dentro para que el periódico absorba la humedad y remover el exceso de agua. Déjalos secar completamente sin usar nada de calor. Cuando estén completamente secos podrás limpiar la suciedad con un cepillo de dientes limpio y seco, para finalizar péinalos en una sola dirección.

4.- Zapatos de Goma: Estos no son nada complicados. Solamente pasa un cepillo con jabón para ropa y agua para quitarles lo sucio. Si son zapatos blancos, utiliza un cepillo de dientes y pasta de dientes, ¡quedarán perfectos! Para que se sequen muy bien, puedes dejarlos al sol, pero si sigue nublado, ¡déjalos detrás del refrigerador! El calor que genera te ayudará a que estén listos para que vuelvas a usarlos de inmediato.

5.- Botas: Aunque las botas para lluvia están diseñadas para resistir el agua, también necesitan secarse. Llena un recipiente de plástico largo con varias piedritas y colócalo en la entrada de tu casa. Cuando llegues, pon las botas sobre las piedritas para que escurran y las piedras absorban la humedad.  Esto evitará que se hagan charcos y le darán más vida a tus botas.


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